El sábado nos decidimos a realizar una ruteja cortita debido a los compromisos que teníamos todos al mediodía así que dejamos el coche en el Embalse de Picadas sobre las 7.50 dónde habíamos quedado a las 8.00 con Ángel, el cual ya estaba allí seguramente hace más minutos.
Esta ruta la habíamos realizado ya desde Aldea del Fresno, Ángel y yo pero Manolo no así que era novedad para él.
Nada más salir del Embalse de Picadas por el sendero que nos llevaría a coger el camino que bordear la M-501, tenemos la primera caída del día, o sea, la mía, simplemente fuí a comenzar la ascensión por el sendero cuando no me dió tiempo a quitarme los automáticos cuando me caí pero en parado parado, vamos que no me hice nada ni la bici tampoco, ¡¡¡ ya habíamos estrenado la bici con una caída !!!.
No pasan de 2 minutos cuando en una raíz que hay en el sendero, en la cual no hay biker que no tenga problemas con ella, cuando Manolo se queda encajado con su bici, se empieza a caer pero se agarra a una rama con sus mano con la buena suerte que la rama se parte y el resto imaginarlo......¡¡¡ barranco abajo !!!, jejeje. No le pasó nada aunque los riñones lo notaron un poco pero al final de la ruta Manolo se seguía resintiendo de ellos pero en general estaba bien.
La ruta se realizó exactamente igual que la que realizamos desde Aldea del Fresno pero esta vez tuvimos que realizar algún cambio a la ida del recorrido como el meternos en el pueblo de Pelayos de la Presa para después ascender hasta La Granjilla dónde paramos en una fuente. Todo ello debido a que había un finca por la cual pasamos siempre que la habíamos cerrado la valla y aunque se podía pasar por una abertura que había no nos arriesgamos por si estaba el dueño o perros...
Hasta La Granjilla al realizar esta modificación tuvimos una subida muy importante pero menos mal que la subida nos daba descansos y no se hacía muy pesada.
Antes de llegar a la localidad de San Martín de la Vega bajamos una gran y chulísima trialera en la cual me vuelvo a caer pero esta vez la caída no fué en parado sino que tuve la mala suerte que según bajaba la rueda delantera se me metió en un surco y con una piedra resbalé para que la bici se me fuera a mi izquierda y.... ¡¡¡ zasssss !!! otra caída pero igualmente no me pasó nada aunque me raspé parte del muslo y gemelo izquierdo además de hacerme una herida en el codo, pero soy duro y continué la ruta como si nada. La bici no se hizo nada a excepcion de un pequeño "rasguño" en el puño izquierdo ¡¡¡ ahora sí que la habíamos estrenado !!!.
El resto del recorrido se realizó igual aunque, esta vez, nos adentramos en San Martín de Valdeiglesias para visitar el castillo y desde allí volvemos por otro camino para pasar por las afueras de Pelayos de la Presa.
A la altura de la gasolinera que hay en la entrada de Pelayos al lado de Puerto naútico del Pantano de San Juan al poco de comenzar un sendero de descenso en una curva de derechas, Ángel termina de cerrar el grupo de las caídas con una buena "ossst..a". Había un surco en el sendero el cual estaba oculto con mucha arena pero al inclinar la bici para girar hacía el lado derecho, la bici se escurre y lo siguiente ya os lo imagináis.
Lo importante de todo es que no le pasó nada y pudimos continuar sin problemas alguno hasta el coche para acabar la ruta sobre las 11.30.
1 comentario:
Va a ser que ese dia no tenias aue haber salido, vamos digo yo, por lo demas sois duros de narizes, porque siendo yo, a la primera caida me vuelvo para casita,un abrazo.
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